EDI: Integración como estrategia para la inclusión
Carrera: Profesorado de Educación Secundaria en Biología
Asignatura: Tecnología de la Información y de la Comunicación y la Enseñanza (TIC y la Enseñanza)
Profesor: Lic Hallar Karim
Curso: 2do año
Carga Horaria Semanal: 4 hrs.
Régimen: Cuatrimestral
Ciclo Lectivo: 2016
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FUNDAMENTACIÓN
La cultura actual está siendo transformada por la integración de los nuevos sistemas y medios de comunicación o tecnologías de la información y de la comunicación (TIC). Estos procesos de cambio han transformado la manera en que los seres humanos comprendemos el mundo. Hablar de transformación de la cultura lleva inevitablemente a evaluar los impactos de la misma en el sistema educativo y en la formación profesional docente.
A partir de la aparición generalizada de las TIC se hace necesario redefinir el concepto de persona alfabetizada.
Tradicionalmente una persona alfabetizada era aquella que había desarrollado el lenguaje hablado y escrito como sistema de representación para la comunicación con otros. Sin embargo, en un futuro no muy lejano, para que una persona sea considerada alfabetizada deberá además, estar alfabetizada tecnológicamente. Desde esta perspectiva, la escuela deberá trabajar en pos de una alfabetización para los medios de comunicación, con el propósito de desarrollar un conjunto de capacidades que le permitan a los individuos enfrentar el cambio, la complejidad, y resolver satisfactoriamente situaciones y problemas individuales y sociales de la vida cotidiana, sosteniendo decisiones razonables frente a la tecnología y la sociedad. El desafío a enfrentar desde el sector educativo es la introducción de las TIC con sentido pedagógico, es decir, como herramientas que, más allá de permitir un acceso fluido y permanente a la información disponible en un momento dado, colaboren en la construcción de conocimiento socialmente relevante.
La incorporación de las tecnologías de la información y la comunicación en los procesos educativos, uno de los principales desafíos planteados hoy a la educación, responde en contadas ocasiones a las expectativas generadas previamente. La capacidad lenitiva y transformadora que se suele atribuir a estas tecnologías tiene su origen o están fuertemente influenciadas, en la mayoría de los casos, por estrategias de expansión comercial de las principales empresas informáticas y de telecomunicaciones o por centros de investigación implicados en el desarrollo de nuevas aplicaciones. Sin embargo, a pesar de estos y otras posibles observaciones y reparos, las computadoras y otros dispositivos digitales, tales como teléfonos celulares y cámaras de fotos, entre otros, abren interesantes oportunidades para la educación en sus diferentes niveles y modalidades.
En este nuevo contexto cultural la escuela se ve enfrentada al desafío de acentuar su función de brindar experiencias para el desarrollo de capacidades, por encima de su rol tradicional de transferencia de contenidos. La formación de un/a docente hoy requiere dejar de lado la enseñanza tradicional fragmentada y exige del docente prácticas más significativas con la utilización de estrategias que realmente le permitan al alumno/a desarrollar habilidades para desenvolverse en la sociedad actual. Si bien la intervención docente es necesaria, es de vital importancia la colaboración entre alumnos/as y la interacción con las herramientas brindadas por las TIC. Los/as estudiantes pasan a ser más activos y no sólo deberán lograr acceder a la información sino que, más importante aún, deberán saber qué hacer con la misma: los sistemas de aprendizaje con hipermedios dejarán más responsabilidad al estudiante en cuanto a acceder a la información, secuenciarla y extraer significados.
Para confirmar el potencial educativo de las TIC es importante abandonar la visión instrumental, aún predominante, para centrar los esfuerzos en el desarrollo de usos pedagógicamente significativos enfocados en transformar las formas de enseñar y de aprender. Para conseguir esto la formación de los docentes en el uso pedagógico de estas tecnologías es capital.
Lo expuesto comporta la imperiosa necesidad de una nueva forma de concebir las prácticas escolares, de formar docentes que atiendan al diseño e implementación de estrategias que incluyan cambios conceptuales en la concepción del uso de las TIC y la reflexión sobre por qué y cuándo utilizarlas.